Dos conquenses en el Sáhara. Tercera etapa Tuareg: dunas, oasis de Oubira y lago Yasmina
Por Luis Lapeña y Manuel Saz.
Hoy hemos empezado la primera travesía del desierto de Erg Chebby, en una jornada espectacular y, claro está, con una temperatura fenomenal.
Hemos salido tempranito y, después de hacer un montón de dunas para arriba y para abajo, atravesando el desierto, hemos parado a almorzar en un maravilloso oasis llamado Oubira. Un oasis, en círculo, que se encuentra dentro de una concentración de dunas, de diferentes tamaños, y al pie de una duna que rondará los 140 metros de altura. Un milagro de esos que siempre nos han contado, en pleno desierto, en el que han instalado campamentos y albergues y en el que deberás abrigarte por la noche
Después de un buen almuerzo y un té, que nos han preparado unos lugareños, del desierto, hemos emprendido otra vez el camino duna arriba, duna abajo, con unos coches fantásticos y un ambiente de compañerismo, tremendo, hasta la comida en un sitio paradisíaco, paradisíaco porque paradisíaco es el lago Yasmina. Una maravilla natural ubicada en el corazón del desierto del Sáhara, en esta región de Erg Chebbi, en Marruecos. Un lago de agua dulce que es una verdadera joya escondida en medio de las dunas de arena y considerado uno de los lugares más espectaculares del Sáhara.
Concluida la comida, hemos iniciado de nuevo la marcha y hemos seguido subiendo y bajando dunas hasta llegar al lecho de un de un río que te deja con la boca abierta porque no te esperas semejante cosa por aquí. Con las lluvias, sorprendentemente hay zonas en las que ha crecido la vegetación y que, a pesar de todo, permanecen verdes y, bueno, lo del lago Yasmina es una preciosidad tras una mañana de aúpa.
Ahora mismo estamos de regreso en el hotel, nos vamos a dar una duchita, a cenar y a ver mañana qué nos depara el día.
Vídeos
Lago Yasmina
Música de percusión en el oasis