Adif Alta Velocidad ha adjudicado obras de acondicionamiento y mejora de los taludes de la estación de Cuenca Fernando Zóbel, perteneciente a la Línea de Alta Velocidad (LAV) Madrid-Levante, por un importe de 177.774,4 euros (IVA incluido) y un plazo de ejecución de seis meses.
Los trabajos se realizarán en el talud derecho del desmonte, situado entre los puntos kilométricos 194/780 y 195/230 de la LAV, en las inmediaciones de la terminal ferroviaria, y que presenta cierto deterioro como consecuencia de la erosión provocada por el agua de escorrentía.
Las principales actuaciones consisten en la revegetación del talud mediante hidrosiembra, y la plantación de arbustos en una franja de ocho metros de ancho próxima al pie del mismo, en la zona frente al andén segundo de la estación. Como consecuencia de esta actuación, se reducirá considerablemente el mantenimiento de las cunetas de pie (las ubicadas en la parte superior del terraplén). También se llevarán a cabo mejoras en el drenaje longitudinal en la coronación del desmonte.
Con esta actuación, Adif Alta Velocidad pretende detener el proceso erosivo del talud de desmonte y reparar el deterioro de su superficie, así como mejorar la integración paisajística de la estación de Cuenca Fernando Zóbel.
Los trabajos han sido adjudicados a la empresa Comsa.
Estas mejoras se suman a otras ya ejecutadas en la estación durante 2016, por importe superior a los 200.000 euros, y consistentes en el recrecido de dos andenes; la mejora de las condiciones de la cubierta a fin de facilitar las labores de mantenimiento y acceso; la instalación de una celosía en el cerramiento de la venta de billetes, la colocación de una bomba de achique en el foso de escaleras, la ejecución de una marquesina en la zona de los aparcamientos y la modificación de la gran trampilla acceso a la arqueta con objeto de mejorar su operatividad.
La estación Fernando Zóbel de Cuenca fue inaugurada en diciembre de 2010 y ocupa una superficie de 3.625 metros cuadrados distribuidos en dos volúmenes de características físicas distintas y destinados a usos diferentes.
El primer volumen, un prisma de cristal protegido del sol mediante lamas metálicas verticales, alberga el vestíbulo, la zona de tránsito de pasajeros y una zona acotada de embarque. El segundo volumen, construido a menor altura a modo de prisma de piedra, está conectado con el primero y alberga las dependencias destinadas al funcionamiento interno de la estación: venta de billetes, atención al cliente, aseos, oficinas y cafetería, entre otros.