El Juzgado de Primera Instancia nº4 de Guadalajara pone fin a la situación económica insostenible de esta deudora aplicando la cada vez más conocida ¨Ley de Segundas Oportunidades¨. La Asociación de Ayuda al Endeudamiento ha llevado íntegramente este proceso.
Historia sobre cómo poner fin a un proceso de embargo y una situación financiera insostenible
La protagonista de este caso acumuló créditos, tanto privados como públicos, que tras el estallido de la pandemia no pudo abonar al día. Esto propició que se dispararan hasta llegar a 270.822,72 euros.
El no pagar se tradujo en un acoso constante por parte de las empresas de recobro y en un embargo que no solo atacó su nómina, si no también su único bien: su coche. Ante tal situación y con el riesgo de perder su vehículo decidió acudir a profesionales.
Fue así cuando, en abril de 2020, solicitó asesoramiento a la Asociación de Ayuda al Endeudamiento, entidad con presencia nacional especializada en este tipo de casos. Tras valorar su caso, los abogados de la Asociación le aconsejaron declararse insolvente y acogerse al proceso de la Ley de la Segunda Oportunidad.
Con el inicio del trámite iba a obtener el primer beneficio inmediato: la suspensión del embargo ya iniciado. Además, este mecanismo también paraliza cualquier pago o devengo de intereses permitiendo un respiro importante a la deudora.
A partir de ahí, comenzaron de verdad los pasos para cancelar el 100% de las deudas de esta ciudadana.
Requisitos para conseguir la liberación definitiva de las deudas:
El primer requisito es sin duda el más importante: debe acreditarse la buena fe del deudor. Para ello, resulta indispensable no tener antecedentes penales económicos y proponer un plan de pagos acorde a sus ingresos a todos los acreedores. Se trata de un último esfuerzo que exige la Ley para que estos tengan la opción de cobrar algo.
En el presente caso, a pesar del esfuerzo de la interesada, la respuesta a la propuesta fue negativa. En esta situación, la deudora solicitó su concurso de acreedores consecutivo.
El Juzgado de Primera Instancia nº 4 de Guadalajara ha sido el conocedor de este procedimiento y encargado de comprobar que se daban todos los requisitos necesarios para condonar los pagos. Estos presupuestos son en resumen: la insolvencia de la solicitante, que la cuantía global de la deuda no supere los cinco millones de euros, el intento de acuerdo de pagos y, por supuesto, que carecía de condenas por delitos económicos.
Así, el pasado 1 de octubre de 2021 fue dictada la resolución concediendo el BEPI (Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho) ha supuesto dejar a esta deudora libre de 270.822,72 euros y poniendo fin al proceso de embargo iniciado por las entidades bancarias.
Desde este 1 de octubre de 2021 los acreedores -entre ellos Targobank o Eurocaja Rural- han visto cómo sus créditos han sido cancelados definitivamente. Ya no podrán reclamar ningún pago más ni incluir en ficheros de morosos a la ya ex-deudora.
Con esta sentencia, ya han sido más de un millón y medio de euros de deudas los cancelados por La Asociación de Ayuda al Endeudamiento en Castilla-La Mancha en lo que va de 2021. Sin ir más lejos, el pasado mes de septiembre fue en Ocaña (Toledo) donde consiguió que un matrimonio se librase de pagar 121.205,78 euros de deuda.