
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha aplaudido el alto grado de consenso con el que terminó ayer el Consejo Interterritorial de Salud, que se celebró en Madrid, y en el que por “16 a uno” se aprobaron las medidas a tomar desde el 26 de marzo al 9 de abril. “Unas medidas que fortalecen la idea de combatir la recta final de la pandemia”, ha apuntado.
Según ha explicado “en Castilla-La Mancha nos ajustamos al Decreto en cumplimiento de la Ley como debe hacer todo el mundo”. Así, se mantendrá el cierre perimetral de la Comunidad Autónoma; el número de comensales dentro de un establecimiento será de cuatro (hasta ahora era de seis) y de seis en terraza; y el toque de queda se pasa a las 23:00 horas (que estaba fijado a las 00:00) y se mantiene también para los establecimientos de restauración.
A este respecto ha avanzado que todos los municipios de la región pasarán a nivel 2, con la advertencia de que “si se desmadran los datos” se volverán a adoptar restricciones.
Todas las medidas relatadas por el presidente García-Page son coyunturales de tal modo que tan pronto pase la Semana Santa y la fecha tope, acordada por el Consejo Interterritorial, se celebrará un Consejo de Gobierno Extraordinario para decidir el siguiente paso a dar en la lucha contra la pandemia.