El alcalde de Azuqueca de Henares, Miguel Óscar Aparicio, y el concejal de Desarrollo Sostenible, Rodrigo Vasco, han visitado este miércoles, 2 de octubre, la Reserva Ornitológica Municipal (ROM) junto con varios representantes de Logicor, empresa propietaria, promotora y gestora de naves de logística con una importante presencia en la ciudad azudense. La visita ha permitido presentar las nuevas islas artificiales -10 en total y con una superficie de 60 metros cuadrados- que se han instalado en La Chorlitejo, una de las cuatro lagunas de este equipamiento medioambiental, y en el marco de un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento y Logicor.
“Es un proyecto que va a mejorar significativamente este espacio”, ha afirmado el regidor, quien ha destacado que las nuevas islas se incorporan a la Reserva en una fecha muy especial, ya que este fin de semana del 5 y 6 de octubre se conmemora el Día de las Aves. Por ello, el Ayuntamiento organiza el sábado 5, de 10 a 12 horas, una visita guiada a la ROM, gratuita y con inscripción previa en el correo electrónico equipamientosambientales@azuqueca.net.
Depuración de aguas
Rodrigo Vasco, por su parte, ha agradecido la inversión realizada en Logicor en “este espacio tan importante” y ha mencionado de los beneficios que aportan las islas flotantes como “la mejora del ecosistema con el refugio de aves y la filtración y depuración de las aguas”. “El convenio con Logicor refleja el compromiso de las dos partes con el medio ambiente y se incluye en la Agenda 2030, en concreto, en el objetivo 17 de búsqueda y fomento de alianzas”, ha indicado.
Desde Logicor, su director técnico en España, Iván Florencia, que ha estado acompañado por Juan Luque, Senior Asset Manager, y Marta Castro, Technical Manager, ha afirmado que la Reserva es “una joya”. Asimismo, ha expresado el deseo de la empresa de mantener la colaboración. “Es un proyecto muy relevante porque nos ayuda a devolver un poco de aquello que la naturaleza nos da y a generar un mejor impacto a nivel de sostenibilidad y biodiversidad”, ha dicho.
Jesús Puebla, técnico encargado de la ROM, ha detallado que “los módulos tienen un tamaño de 2×1 metro y se han montado en islas más pequeñas para ganar en biodiversidad”. En cuanto a sus funciones, ha distinguido que la superficie, con una veintena de plantas autóctonas y que crecen en hidroponía –sin sustrato, directamente sobre el agua-, transforma el CO2 en oxígeno, ofrece alimento con las semillas, da cobertura para anidar, es una zona para que tomen el sol los galápagos y facilita la polinización. Por otra parte, bajo la superficie, posibilita la depuración radicular, refugio para peces y anfibios y da sombra al agua.