El próximo 8 de abril se conmemora el Día Internacional del Pueblo Gitano, “una fecha que no es sólo un día en el calendario, sino una oportunidad para seguir construyendo juntos una sociedad más justa y respetuosa”, ha señalado Eva Henche, concejala de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Guadalajara.
Henche ha reafirmado el compromiso del consistorio con la comunidad gitana, “con su cultura, sus valores y su lucha por el reconocimiento y la inclusión”. En este sentido, ha destacado el papel del programa Avanza, una programa impulsado desde la concejalía de Servicios Sociales que busca concienciar a las familias gitanas sobre la importancia de la educación como motor de igualdad y futuro.
Por su parte, María José Bustos, directora de Cáritas Diocesana Sigüenza-Guadalajara, ha subrayado el trabajo que realiza el proyecto Tejiendo Caminos, destinado a apoyar a mujeres gitanas residentes en Guadalajara. “Les ofrecemos talleres y actividades donde adquieren conocimientos en ámbitos como la salud, la cocina o las competencias digitales”, ha explicado.
La celebración del Día Internacional del Pueblo Gitano tendrá lugar el martes 8 de abril a partir de las 16:00 h en el Centro Social Los Valles. Será una jornada de convivencia abierta a toda la ciudadanía. Durante el acto, se leerá un manifiesto en defensa de los derechos y la dignidad del pueblo gitano. Carmen Lestón, representante de esta comunidad, ha reivindicado la necesidad de “romper con los prejuicios y las representaciones injustas y erróneas ” y ha señalado que “ha llegado el momento de entender que somos una cultura que valora profundamente la familia, las tradiciones y nuestro pasado. También tenemos arte, cultura e identidad, y no queremos que se nos siga invisibilizando”.
El programa Avanza, una apuesta por la educación
El programa Avanza, promovido desde los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Guadalajara, acompaña actualmente a más de veinte familias gitanas con el objetivo de poner en valor la escolarización y combatir el abandono escolar.
“Trabajamos de forma transversal con los niños y niñas, sus familias y los centros educativos”, ha explicado Sandra Rodríguez de Vera, educadora social del proyecto. Aunque la tasa de escolarización de la población gitana alcanza el 95%, Rodríguez de Vera ha advertido de que persisten dos grandes retos: el abandono escolar y el fracaso académico. “Hemos observado que, en el caso de la comunidad gitana, la tasa de abandono escolar es un 73% más alta en el alumnado gitano mientras que la tasa de fracaso escolar es un 58,8% mayor en dicho alumnado. Por ello, es imprescindible trabajar las consecuencias de no completar la formación básica”, ha afirmado.
Además, ha indicado que la situación es aún más grave en el caso de las niñas gitanas. En 2025, el programa se desarrolla en seis centros educativos de la ciudad, con acciones como puntos informativos durante los recreos para fomentar la inclusión y la interculturalidad, además de actividades con las familias y el profesorado.
También se trabaja con los docentes para promover el conocimiento de la historia y cultura del pueblo gitano, una cuestión recogida en la ley educativa pero que, según ha señalado Rodríguez de Vera, “aún se aborda de manera muy superficial”.