Asomó tímidamente el Royo Malo, por esta sierra del agua (Parque Natural de la Serranía de Cuenca), aprovechando las lluvias caídas. Este Royo Malo, que nace en el Cerro de la Sima, a casi 1.400 metros de altitud, baja despeñándose, filtrando sus aguas, llenando galerías y sifones de la cueva de Royo Malo para que, gracias a las lluvias o a nieves derretidas, salgan sus aguas en lo que llaman reventón o crecida.