Estival Caipiriña marcó el pistoletazo de salida de la octava edición de Estival Cuenca. La propuesta de bossa nova, bebidas tropicales y ambiente único del Casco Antiguo hicieron las delicias del más del medio centenar de asistentes que mostraron una calurosa bienvenida al festival.
Con algo más de una hora de concierto, la voz melosa de Betencourt se ensambló con facilidad con los acordes de su guitarra y el ritmo marcado de su percusionista. A los pocos instantes, los asistentes ya rodeaban el angosto pasaje sin dejar de estar en movimiento gracias a la magia musical. Otros más atrevidos se arrancaron con bailes dotando de un gran ambiente entre mojitos y caipiriñas a una noche que sólo supone el entrante de los próximos eventos del festival.
Un primer concierto que contó con las versiones de ‘Nao deixe o samba morrer’ de Alcione, ‘Fadas’ de Luis Melodía o ‘Voce e linda’ de Caetano Veloso, y que será posible ver de nuevo, esta vez en el Parador de Cuenca, el próximo 1 de julio. Tanto Walter como Daniel, integrantes del grupo ‘Heritage’, precederán al concierto estrella del espacio ‘Estival Cancion de Autor’, con la actuación de Depedro.
La actividad estivalera se detiene de forma momentánea hasta el próximo miércoles, donde arrancará a partir de las 22:00 horas el apartado dedicado al cine y la fotografía de este festival. Así, en la Plaza de la Merced de la capital conquense se proyectará la película rodada en Cuenca El valle de Gwangi, de Jim O’Conolloy (1969, EEUU, Warner Bros). Previamente será el estreno del documental resumen de Estival Cuenca 18, obra de Vicente Ortega Losa.
Recuerda que tienes disponible entradas y programación en www.EstivalCuenca.org