En la tarde de ayer, el programa de festejos de Fuentenovilla continuaba con la décima edición de la Yincana de Navidad, organizada por la Biblioteca Blas de Salcedo.
Además de un propósito lúdico, la Biblioteca incluye esta actividad como una más de las que programa a lo largo del año, bajo el epígrafe de Animación a la lectura.
La fiesta infantil del CRA Pimafad, y la yincana, suponen el inicio, para los más pequeños, de la programación navideña.
En la de ayer, podían participar niños de cuatro a doce años. Fueron divididos en dos equipos de los que formaron parte los que viven habitualmente en Fuentenovilla, y los que regresan al pueblo por Navidad.
La tarde era fría pero soleada, así que los niños pudieron disfrutar, un año más, de las pruebas, jugando en la calle, y relacionándose con el entorno y el patrimonio del pueblo.
Pero siempre con la cultura como telón de fondo. Por eso, cada prueba tenía un referente literario o cultural, relacionado, en este caso con la Navidad. Se recordó, por ejemplo, el imperecedero ‘Cuento de Navidad’, de Charles Dickens. Así, aparecía el fantasma de la Navidad “para concienciar a los niños que el pasado hay que recordarlo, pero que lo importante es el presente, que condicionará las navidades del futuro”, explicaba José Vicente Monge, bibliotecario de Fuentenovilla.
Igualmente, en otras pruebas también hubo referencias a los villancicos populares, que los participantes tenían que adivinar o cantar. En el juego de ‘Pasapalabra’ las preguntas también tuvieron como referente la cultura y la Navidad. Al terminar, todos los participantes recibieron un detalle.
La alcaldesa de Fuentenovilla, Montserrat Rivas, agradece “la implicación de la Biblioteca con los niños, y sobre todo, que en cada propuesta que se hace, se inculque el amor por la lectura, ahora en Navidad”.