El Gobierno regional, a través de la Consejería de Desarrollo Sostenible, ha presentado este martes en Cuenca, el nuevo proyecto Life europeo denominado ‘Wood4life’ que cuenta con una inversión superior a 3,3 millones de euros y que promoverá el sector forestal “para contribuir a la fijación de carbono desde los bosques hasta los productos madereros sostenibles”.
Así lo ha avanzado la consejera Mercedes Gómez que ha asistido, en la sede de la Universidad de Castilla-La Mancha en el campus conquense, al foro de trabajo de lanzamiento del proyecto que se celebra durante dos días con todos sus socios “con el objeto de realizar una puesta en común de las acciones y paquetes de trabajo que deberán desarrollarse durante los próximos cuatro años que va a durar este proyecto Life”, ha indicado.
“El objetivo general es proponer herramientas y modelos de negocio para reactivar la cadena de valor forestal y fortalecer su papel fundamental en la mitigación del cambio climático a través de la capacidad de captura de carbono y proporcionando materiales con menos emisiones de gases de efecto invernadero, en línea con la Estrategia del Carbon Farming de la Comisión Europea”, ha explicado Gómez.
Wood4Life involucrará a los actores clave de la cadena de valor forestal, probará prácticas mejoradas de gestión forestal en bosques productivos de Castilla-La Mancha para incrementar la captura de carbono, la conservación de la biodiversidad y la producción de madera para suministrar a las industrias que elaboran productos de larga duración basados en la madera, como los que demanda el sector de la construcción, ha explicado Gómez.
Así a nivel de la UE, se actuará en Castilla-La Mancha, en concreto en la Serranía de Cuenca y el Alto Tajo en Guadalajara; y en Italia, en el Parque Nacional de los Apeninos tosco-emilianos. Para ello, se apostará por la innovación con el desarrollo de nuevas prácticas y tecnologías y la colaboración de un trabajo en red con la participación de múltiples actores, propietarios públicos y privados, empresas del sector forestal y de la construcción, universidad, investigadores y expertos consultores. Y por otro, ciudadanos interesados en el medio ambiente, consumidores de productos sostenibles.
La consejera ha puesto en valor la contribución de la Unión Europea para poner en marcha este proyecto conjunto entre regiones de España e Italia, aportando un 60 por ciento del presupuesto, en torno a 1,9 millones de euros.
“Este proyecto fomentará la agrupación y asociación de los propietarios forestales para la creación de grupos de gestión técnica y económicamente viables, haciendo hincapié en el fomento de los aprovechamientos de madera”. Y todo ello, como ha asegurado, “en el contexto del futuro plan estratégico del sector forestal en el que estamos trabajando desde el Gobierno de Castilla-La Mancha con el objetivo puesto en aprovechar las oportunidades que está demandando el sector de la construcción. Una estrategia que vamos a desarrollar como hoja de ruta en los próximos años”.
La consejera ha estado acompañada durante la presentación por el alcalde de Cuenca, Darío Dolz; la delegada de la Junta en Cuenca, Marian López; el vicerrector de Cultura, Deporte y Responsabilidad Social de la UCLM, Cesar Sánchez Meléndez; el viceconsejero de Medio Ambiente, José Almodóvar; la directora general de Medio Natural y Biodiversidad, Susana Jara; y el delegado provincial de Desarrollo Sostenible, Jose Ignacio Benito, entre otros representantes institucionales.
Potencial del sector forestal y los servicios ecosistémicos que ofrece
Como se ha explicado durante la presentación, el sector forestal es fundamental para la transición hacia un futuro con bajas emisiones de carbono, circular y positivo para la naturaleza. Los bosques desempeñan un papel crucial en la absorción de CO2 y la mitigación del cambio climático, al tiempo que brindan múltiples servicios ecosistémicos.
La forestación, la restauración y la mejora de la gestión forestal pueden aumentar el almacenamiento de carbono en los suelos y la biomasa, mientras que el uso de materiales basados en la madera en productos de larga duración garantiza el almacenamiento de carbono a largo plazo fuera del bosque.
Sin embargo, la alta fragmentación, la falta de formas asociativas y habilidades sectoriales, las cadenas de suministro de madera de bajo valor y la falta de remuneración de los servicios ecosistémicos están aumentando el abandono forestal, lo que lleva a una menor resiliencia al cambio climático.
Socios españoles e italianos del ‘Wood4Life’
La Consejería de Desarrollo Sostenible es coordinadora del proyecto Wood4Life y además en España se cuenta con la consultora Dendron Consultoría Forestal S.L. (formada por un equipo multidisciplinar de ingenieros forestales y biólogos con grandes competencias en gestión y desarrollo de estrategias de gobernanza en el territorio donde se implementa el proyecto). La agencia estatal Consejo Superior de Investigaciones Científicas a través del Instituto de Ciencias Forestales (CSIC-ICIFOR), cuya misión será aportar el conocimiento necesario para llevar a cabo la conservación, gestión y uso sostenible de los sistemas y recursos forestales.
La empresa Lignum Tech, pyme innovadora dedicada al desarrollo y fabricación de sistemas constructivos industrializados para edificios residenciales y que aspira a desempeñar un importante papel en la cadena regional de la madera. La entidad FSC (Forest Stewardship Council), organización internacional sin fines de lucro para promover el uso racional de los productos y servicios del monte cuyo certificado es el más reconocido a nivel mundial en los mercados y en los consumidores como garantía de origen y sostenibilidad.
Y, por último, la Universidad de Castilla-La Mancha, a través de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y de Montes y Biotecnología (ETSIAMB) con un equipo multidisciplinar con amplio conocimiento y experiencia en proyectos de adaptación al cambio climático.
Por parte de Italia, participan Etifor SRL, una empresa de consultoría derivada de la Universidad de Padua y altamente especializada que ofrece soluciones a los principales desafíos socioeconómicos en el marco de proyectos de desarrollo y conservación de la naturaleza.
El Parque Nacional de los Apeninos tosco-emilianos que se extiende sobre 26.140 hectáreas en dos regiones administrativas (Toscana y Emilia-Romaña), cuatro provincias y 14 municipios y cuyos objetivos son la conservación y valorización del patrimonio natural, la preservación y reconstrucción de los equilibrios hidrogeológicos y la promoción de las actividades socioeconómicas locales.
Y, por último, Conlegno (Consorcio de Servicios Legno-Sughero), un consorcio privado sin ánimo de lucro fundado en 2004 cuya misión es promover los diferentes usos de la madera, desde la materia prima hasta el embalaje, incluida la madera estructural. La principal herramienta utilizada es la marca de calidad y fiabilidad de los productos y servicios (gestiona y promueve 14 marcas diferentes).