La cadaverina, una poliamina que se forma naturalmente durante la descomposición de proteínas y de muy mal olor, es el primer atrayente efectivo para detectar la presencia de lobo ibérico, según revela un estudio realizado por el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC) de la Universidad de Castilla-La Mancha. El uso de esta sustancia podría contribuir a mejorar la eficacia de métodos de monitorización como el fototrampeo, las capturas, los muestreos genéticos o las estimas de abundancia.
Un estudio del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC), -centro mixto dependiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la Universidad de Castilla–La Mancha (UCLM) y la Junta de Comunidades de Castilla–La Mancha-, ha identificado el primer atrayente efectivo para aumentar la detección del lobo ibérico, en cautividad y en libertad. Se trata de la cadaverina, una sustancia biogénica que se encuentra principalmente en la materia orgánica muerta y que es conocida por su olor fétido característico.
El estudio, publicado en la revista European Journal of Wildlife Research, está liderado por la doctoranda de la UCLM Lucía del Río Pérez y ha contado con la participación de los grupos de investigación en Ecología y Gestión de Fauna Silvestre y Toxicología de Fauna Silvestre del IREC y de científicos del CSIC y de la Universidad de Córdoba. Hasta la fecha, según los investigadores, “no había ningún atrayente efectivo para lobo ibérico”.
La investigación, centrada en evaluar la eficacia de cinco atrayentes y el comportamiento de las poblaciones de lobo ibérico ante ellos, incluyó ensayos en cautividad en el parque de la naturaleza de Sendaviva (Navarra) con cinco atrayentes potenciales: extracto de carne, cadaverina, FAS (mezcla de ácidos grasos), orina de lince y valeriana. Según los investigadores, los atrayentes provocaron diferentes comportamientos en los lobos: oler, frotar, revolcarse, marcar y lamer.
La cadaverina, el FAS y la orina de lince resultaron ser los atrayentes preferidos, siendo la cadaverina el atrayente que más visitas recibió y más comportamientos de respuesta (frotado y revolcado) provocó en los lobos.
Además, los tres atrayentes más efectivos en cautividad se probaron en condiciones reales de campo, en la Sierra de la Demanda (La Rioja). En estos ensayos, la cadaverina resultó la opción preferida. Sin embargo, según los investigadores, la presencia de cebo no tuvo efecto significativo en las tasas de visita de los lobos silvestres.
Los investigadores -junto a Del Río son autores del estudio Jon Ander Zearra, Rafael Mateo, Pablo Ferreras y Jorge Tobajas-, concluyen que selección de un atrayente apropiado puede ser crucial en estudios de las poblaciones de lobo. Los resultados del trabajo han revelado que el uso de la cadaverina puede contribuir a mejorar la eficacia de los métodos de monitorización, estima de abundancia y distribución del lobo ibérico, y de la técnica de aversión condicionada para reducir el impacto de la depredación de este gran carnívoro sobre el ganado.
El lobo ibérico (Canis lupus signatus) es actualmente una especie protegida para conseguir preservar su conservación. Además, causa numerosos daños al ganado en extensivo y se convierte en foco de un conflicto social entre conservacionistas y ganaderos. Por ello, según los investigadores, “el descubrimiento de un atrayente efectivo puede ayudar a la monitorización de las manadas de lobo en España y a aplicar medidas de conservación positivas para la especie y la coexistencia con la ganadería en extensivo”.