El pasado lunes, 20 de mayo, el vicepresidente primero del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, la consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, y el Viceconsejero de Medioambiente, José Almodóvar, presentaron la campaña de extinción de incendios de 2024.
Con una puesta en escena propia de un publirreportaje, convocaron a los medios de comunicación para representar un acto de autopromoción del Gobierno Regional, en el que incluso llegó a realizarse una demostración de medíos aéreos, ocurrencia efectista e innecesaria cuyo gasto correrá a cargo de la ciudadanía de nuestra región.
“El mejor sistema del mundo”
El vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, refiriéndose al dispositivo de extinción, declaró:
“No es exagerado decir que es uno de los mejores dispositivos del mundo (…) moderno, ágil, referencia nacional e internacional y con protocolos con otras comunidades autónomas.”
Como era de esperar, en la declaración institucional se omitió cualquier referencia a los recortes en el despliegue y activación de efectivos del Plan Infocam y mucho menos a los conflictos abiertos con el personal funcionario del Cuerpo de Agentes Medioambientales y con los/as trabajadores/as de GEACAM, actores fundamentales y claves en esta campaña de incendios, declarada de ‘alto riesgo’ durante los meses de junio y septiembre y de ‘riesgo extremo’ en julio y agosto.
El pasado 7 de mayo, los/as agentes medioambientales se manifestaron en Toledo, respondiendo a la convocatoria de CSIF, STAS, CCOO y UGT para reivindicar un calendario de negociaciones sobre demandas históricas de este Cuerpo de funcionarios de la JCCM, así como para denunciar el incumplimiento sistemático de los compromisos adquiridos en los últimos nueve años en materia de mejora del servicio, condiciones laborales, de seguridad y medios.
Este año enfrentan una campaña de incendios con menos personal que en ediciones precedentes y con una dotación de medios insuficientes e inadecuados.
La consecuencia de la falta de efectivos es que a duras penas será posible atender las guardias de incendios en la campaña de alto riesgo, ya que cualquier baja o contratiempo provocaría que los servicios mínimos de incendios no se llegasen a cubrir. Además, supondrá un sobresfuerzo de los trabajadores y trabajadoras y una merma en su derecho de conciliación familiar y personal.
Con respecto a la carencia de medios, sirva de ejemplo su denuncia sobre la reciente adquisición, por parte de la Consejería de Desarrollo Sostenible, de 30 coches híbridos enchufables que no sirven para el servicio de lucha contra incendios, ya que se tratan de turismos sin marcha reductora y sólo pueden circular por vías pavimentadas, como así ha determinado el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de Toledo.
El resto de vehículos son un año más viejos que en la campaña anterior, muchos superan los 400.000 kilómetros y los que vienen no son aptos para emergencias.
Los cuatro sindicatos con representación en la mesa sectorial de personal funcionario de la JCCM reclaman a la Administración mayor prudencia en sus afirmaciones; que reconsideren su actitud de diálogo; más personal; aumento en la cantidad y mejora en la calidad de los medios; garantía en sus condiciones de seguridad. Más autobombas para apagar incendios y menos autobombo para encender focos de conflicto laboral.